miércoles, 18 de mayo de 2011

Y ahora, ¿a quien voto yo? III. La democracia participativa: DE HOMBRES, RATONES Y GATOS

"Quédate con tus monedas,
YO QUIERO CAMBIO"
Siguiendo con mi actividad detectivesca, es decir, buscando el sentido de mi voto para el día 22 de mayo, de repente me encuentro con algo que llama mi atención:

LA GENTE SE HA ECHADO A LA CALLE.

Cuando más seguro estaba yo de que la gente se había adormecido; cuando más seguro estaba yo de que España, fiel a su tradición, había por fin conseguido adaptar una supuesta democracia a su régimen favorito, que es el caciquismo; cuando pensaba yo que la gente iba a adorar al cacique por ser tan bueno y darles permiso para existir; en ese momento surge un movimiento también muy español que da cierta esperanza (no Aguirre, no me malinterpreten): la gente ha salido a la calle. Perdón, eso se merece unas mayúsculas:

LA GENTE HA SALIDO A LA CALLE.

En toda España ha habido concentraciones de gente que está descontenta.

Y yo me he dicho:

- Niño, esta es la tuya. De aquí sacamos alguna conclusión para las votaciones seguro.


Lo primero sería averiguar quiénes han salido a la calle y para qué. Y la conclusión es que no es un partido político. Tampoco tienen un ideario o incluso una ideología concreta. Son sencillamente gente harta de ver que en España la crisis ha servido para que los que la han provocado se atrincheren y echen la culpa a otro. Se han dado cuenta de que los causantes de la crisis, es decir, los políticos que se han beneficiado de las burbujas financieras, los bancos y las constructoras que las han provocado, las grandes compañías que se han aprovechado de la crisis para bajar sueldos y echar gente a la calle mientras se reparten bonus, están todos mejor que nunca. Todos reparten beneficios. Y si hay que darles una ayudita, se les da. Eso sí, sin responsabilidad, sin acritud, sin factura. Los gestores, además, ni se bajan el sueldo, ni aceptan responsabilidades por lo que ha ocurrido durante su mandato, ni na ni na.

Y es que, claro, una cosa es que te engañen como ciudadano, y otra muy distinta es que además te llamen tonto mientras te engañan.

Así que, tras constatar lo anterior, me pongo a ver reacciones por parte de los que sí se presentan a las elecciones. El resultado es desolador. Porque yo esperaba una reacción imaginativa. Algo así como que nuestros aspirantes a gestor público abrieran los ojos, se dieran cuenta del descontento que generan. Y que hubieran reaccionado de forma activa y asumiendo que hay muchas personas que se sienten estafadas por la gestión pública. Podrían aceptar la invitación a pronunciarse sobre estas manifestaciones. Incluso intentar adoptar alguna de las peticiones concretas. Por que una de esas peticiones es, precisamente, MÁS DEMOCRACIA DIRECTA. Que un voto no sea un cheque en blanco para cuatro años. Eso me gusta. Así que me pongo a esperar reacciones. Y espero. Y espero. Y ...

DE NUEVO, NADA. Represión y poco más. Oídos sordos y poco más. Actitudes defensivas y mirar hacia otro lado. Una parte significativa del pueblo ha salido a la calle a pedir. Y nuestros políticos se han hecho los suecos, porque saben que un buen político español tiene un arma infalible contra la protesta popular: esperar a que se cansen. Mientras tanto, ponen a todo el aparato oficial de los medios de formación de masas (periódicos, radios, etc) empleados en desprestigiar y minimizar la voz de su pueblo.

Todos ellos tienen intereses que chocan frontalmente con la expresión popular del descontento: Los políticos encuentran la situación incómoda, por que más democracia directa significa más control y menos posibilidad de mamanza. Los medios de formación de masas oficiales no quieren perder su estatus privilegiado de control de la crítica. Si lo pierden, pierden los réditos que da poder negociar con el poder cuándo y cómo criticar.

Así que de nuevo, no encuentro a algún político o programa electoral que sea capaz de ayudarme a decidir el voto. Ninguno ha sabido reaccionar con valentía e imaginación al reto de atender a su pueblo cuando éste lo reclama. CERO DE TRES. Pero no me rindo. Mañana seguiré mi investigación con la seguridad de que algo encontraré para saber a quien debo votar.

Como colofón les dejo una historia y un vídeo:

La historia es un AVISO A NAVEGANTES: Se cuenta (hay muchas más versiones ilustres, pero no viene al caso) que en los días previos a la Revolución Francesa, el pueblo hambriento por la falta de harina para hacer pan fue a protestar ante el Rey. La reacción de María Antonieta fue decir: "Si no tienen pan, que coman costra de pastel". Es decir, se hizo la sorda. María Antonieta acabó perdiendo la cabeza.

El video: No pude estar en Madrid ayer porque vivo muy lejos. Me hubiera gustado. Este vídeo es un homenaje a la gente que, de buena fe y con valentía salió ayer de su casa para pedir más democracia y menos chorizo:


http://www.youtube.com/watch?v=UtTW72F8xo0&feature=player_embedded





No hay comentarios:

Publicar un comentario